Vestir de mantilla es una de las tradiciones más emblemáticas de la Semana Santa. Una prenda que en Semana Santa adquiere un significado especial y que debe acompañarse de una adecuada selección de joyas.
Es importante que tengamos en cuenta que las joyas deben complementar y realzar el atuendo procesional, nunca competir con él.
Joyas de estilo clásico serán siempre una elección acertada.